martes, 5 de febrero de 2008

Piedad Cordoba.... ¿Colombiana?

Bogotá, Colombia (RCN) - El vicepresidente Francisco Santos le respondió este martes a la senadora Piedad Córdoba, quien despreció los alcances y el fondo de la marcha contra la guerrilla de las Farc y dijo que la de este lunes, fue una expresión de odio.
“Desechar de esa manera ocho, nueve, diez millones de colombianos o más que marcharon, no sólo es equivocado e irresponsable sino que también se necesita no tener un dedo de frente para no entender lo que pasó ayer”, afirmó el vicepresidente Santos.

Fuente de Noticias RCN

Un grito que se sintió

"Un millón de voces contra las Farc", ese era el sueño quijotesco de los tres jóvenes, que horrorizados por el mundo dantesco en que pasan sus días, meses y años los secuestrados, lanzaron el mensaje humanitario en un país de supuestos indiferentes para decir no más. La respuesta ciudadana desbordó todos los cálculos: por primera vez en la historia de Colombia más de seis millones de personas salieron a las calles, a lo largo y ancho del país, para decir "¡no más secuestros!", ¡no más Farc!, ¡no más violencia!, ¡no más torturas!", "intercambio humanitario ya!" y otros cientos de consignas, estribillos, pasacalles y cánticos que reflejaban el sentir del pueblo, porque fue el pueblo, lejos de toda conducción política, reeleccionista, partidista, gubernamental u oenegera, el que salió a manifestarse.En Bogotá salió más de un millón de personas en varias marchas, porque fueron muchas, hasta confluir, casi todas, en un mar humano en la plaza de Bolívar.Historiadores y sociólogos consultados, calificaron la presente como la "marcha de las marchas". Lo vivido, aunque muy superior, tiene sus antecedentes en la marcha del silencio, que lideró el caudillo liberal Jorge Eliécer Gaitán, que el 8 de febrero de 1948 reunió en la Capital a unas 50.000 personas que caminaron en silencio y vestidas de luto para protestar por la violencia, y la del 10 de mayo de 1957, cuando los colombianos salieron a las calles en un paro cívico hasta obligar al dictador Gustavo Rojas Pinilla a renunciar. En Cali más de medio millón de personas colmaron el centro de la ciudad. Escenas masivas también se vivieron en casi todos los municipios del Valle. En Tuluá fueron 14 cuadras llenas, en Pradera y Florida la marcha se movió de una ciudad a otra, en los municipios del centro del departamento la asistencia también fue histórica.El río ciudadano, desbordado de manera pacífica, contra la violencia, salió de "cauce" en Manizales, Armenia, Pereira, Ibagué, que tuvieron marchas con más de 60.000 personas cada una.En Barranquilla, los curramberos dejaron de lado las fiestas del Carnaval, casi sagradas para ellos, para reunirse en número cercano a las 200.000 personas, en la Plaza de la Paz. En Cartagena, dicen los cronistas, jamás se había visto tanta gente en la avenida Venezuela; en las capitales sabaneras fueron cuadras y cuadras colmadas de personas luciendo camisetas blancas. En Santa Marta y Riohacha también fueron millares los que salieron.En Valledupar, donde se encontraba el presidente Álvaro Uribe Vélez, acudieron unas 20.000 almas a la Plaza Alfonso López. En San Vicente del Caguán, 300 de sus moradores marcharon por sus calles hasta congregarse en la plaza del pueblo, escenario del frustrado proceso de paz de las Farc con el gobierno Pastrana; en Mocoa y Puerto Asís, Putumayo, se congregaron centenares de personas; en Popayán, Pasto y Neiva más de 100.000 de sus habitantes dijeron presente. En Cúcuta, además de sus moradores, miles de venezolanos cruzaron la frontera para solidarizarse con el pueblo colombiano, "pues nosotros entendemos su sufrimiento porque son decenas los venezolanos plagiados por las Farc", dijo uno de los venezolanos que cruzó la línea divisoria.Ciudad tras ciudad, municipio tras municipio, plaza tras plaza la paz en Colombia demostró que tiene futuro y se reflejó en los millones de jóvenes que salieron a las calles para expresarse de manera civilizada.
La opiniónClara Rojas, quien estuvo secuestrada por las Farc“Queridos amigos, todos. Los recuerdo a cada momento. Quiero que sepan que aquí estamos haciendo todo para que puedan regresar a sus hogares. Mientras tanto deben mantenerse firmes y no decaer”.
León Valencia, director de la Fundación Arco Iris“Es una cosa excepcional, una manifestación inmensa, un mensaje muy fuerte para las Farc, porque es la fuerza de las ideas. A pesar de ser contra las Farc, no sentí un mensaje a la guerra, fue un mensaje de paz”.
Fernando Araújo Perdomo, canciller de la República“Esta respuesta de la gente significa que el país ha unido sus voces para decirle no al terrorismo, no a la violencia, no al secuestro, no a las Farc. Y en este grito nos ha acompañado la comunidad internacional”.
Juan Carlos Lecompte, esposo de Íngrid Betancourt“Estas marchas no son más que un canto a la bandera, muchas veces lo hemos hecho y no ha pasado nada. Lo importante aquí es buscar el acuerdo humanitario que es el único camino para la libertad de los secuestrados”.
Diliam Francisca Toro, médica y senadora“Las Farc deben mostrar buena voluntad y permitir el ingreso de la misión médica a los campamentos. Cuando se limita el accionar de la misión médica se está atentando contra el derecho irrenunciable que es la vida”.

Publicado por Periodico El Colombiano